jueves, 5 de diciembre de 2013

un descanso entre baberos

Me he tomado un pequeño descanso, aprovechando que no tenia ningún babero pendiente, me he dedicado a hacerle una funda a un cojín para Vega, para sentarse a comer mas cómoda y llegar bien a la mesa, ya no necesita arneses como tienen las tronas, va teniendo un poco de conocimiento para saber que no se debe tirar de la silla porque se hace daño (aunque a veces esa pizca de conocimiento se desvanezca y disfrute tirándose de la silla y diciéndome "mamaaaa me caioo", no hija.... te has tirado).

Le compre un trozo de gomaespuma en una tienda de cortinas, pensaba que sería mas caro pero me costo 6 euros, tienen distintos espesores y densidades, así que le cogí un trozo de espesor 10 cm y la máxima densidad, la cortan a medida según el dibujo que les lleves y le hice una forma redondeada para que le sea mas cómoda, ya que se sube a la silla por los laterales, no use todo el ancho de la silla para dejarle espacio a las piernas.

Pensé hacerle la funda de hule, pero se resbalaría mucho, mejor una tela de loneta, que fuese desenfundable porque así se puede lavar y sujetarla a la silla con unos lazos debajo y detrás. Para poder desenfundar tenia que ponerle cremalleras y nunca había puesto ninguna, así que me quede un poco atascada en este punto y menos mal que tenia tela de sobra porque tuve que repetir ese lateral.

Después de pelear con las cremalleras, apenas se ven porque esa parte queda pegada al respaldo de la silla. 

Lo esta usando bastante y no solo para comer, también se pone a dibujar o leer en la mesa de la cocina. Como es muy ligero se puede llevar en el coche si te vas de viaje, con las cintas se puede adaptar a cualquier silla. 



lunes, 25 de noviembre de 2013

Unos cuantos unisex

Me encargaron hacer tres baberos de la talla pequeña y de chico, se que se me resisten un poco y acabo decantandome por las cosas de chica, así que estos eran un reto e hice uno mas para que pudieran elegir. Aproveche para probar un material nuevo para rigidizar el recogemigas, siempre le he puesto entretela pero me he dado cuenta que con los lavados va perdiendo esa rigidez inicial y quizás es obsesión mía pero me gustaría mejorarlo, así que después de probar y darle vueltas me decidí por una banda tejida de plástico que se usa en la confección de cortinas, es perfecta!!!! rígida y lavable, aunque es un poco incomodo de usar al cortarlo pero el resultado me ha gustado mucho mas, repetiré con este material. 

También he probado a sellar con pegamento termo-fusible los agujeritos de la costura del fondo del recogemigas, así se gana en estanquidad por si le caen líquidos, aunque es muy difícil de conseguir un resultado 100% perfecto, al fin y al cabo es un producto artesanal y no lo hace una maquina...jeje.

Estoy muy contenta con el resultado de este grupo de unisex. Me parecen preciosos!!! aunque me costó bastante hacer cuatro a la vez,  se me junto con la "operación pañal fuera" de Vega y virus varios, pero también me ha servido para darme cuenta de mis limites cosiendo y que al ser artesanos tienen mucha dedicación, a mi me gusta hilvanar para que al coserlos queden bien, aunque los haga mas rápido por tener mas experiencia sigo siendo perfeccionista.

martes, 19 de noviembre de 2013

La pieza clave

Sin duda la pieza que mas me gusta del babero es la parte que protege las piernas, puede parecer que sobra, que hace el babero muy largo y es un estorbo, al principio pensaba que era mejor ponerla con velcro y poder quitarla, pero menos mal que la deje cosida. Se ha convertido en una pieza clave sobre todo cuando Vega quiere merendar en su silla y me pide ver la televisión un rato. No es incomodo como pensaba que seria al principio porque la tela de hule o tela resinada es muy ligera, flexible y no molesta.

Aquí se puede ver como queda el babero de talla 2-3 años, el diseño es bastante amplio en los hombros para que dure mas tiempo, con el velcro en el cuello se ajusta muy bien y le pongo un trozo de velcro bastante amplio y de buena calidad para que no se quiten el babero fácilmente de un tirón. El largo ideal es mejor que tape las rodillas al estar sentados y lo malo es que si se levantan las migas que no caen en el recogemigas y caen en el faldón protector... van todas al suelo!!!, pero muchas manchas no caen en la ropa y así se pueden tomar un yogurt ellos solos sin mancharse, aunque no tengan mucha maña en el manejo de la cuchara y se les caiga un poco en las piernas.


martes, 12 de noviembre de 2013

Un buen amigo

Aun teniendo apenas un año recién cumplido y ya se notaba que Vega hacia buenas migas con otro niño de unos amigos, es cinco meses más pequeño que ella y eso que a los niños pequeños no les presta demasiada atención, pero con Gonzalo es diferente, es su compañero de carreras y juegos alocados, es tan bueno que la sigue a todas partes y Vega se parte de risa cuando ve que Gonzalo hace lo que ella quiere, normalmente alguna maldad. Da gusto verlos juntos y es difícil separarlos, que disgustos se llevan!!!

Pues llego el segundo cumpleaños de Gonzalo y le compramos un regalo que sabía que le gustaría mucho, adora los libros y hay una colección de libros que a Vega le encanta, son imágenes reales con sus nombres, es  101 Primeras palabras. También le hice un babero de regalo y resulta que ha sido el primer babero para un niño que hago.

Me cuesta un poco pensar en diseños para niño, pero como no me gusta definir esto es para ellas o esto es para ellos, simplemente lo que hago es no utilizar flores o colores rosas para chico, quizás sea sexista pero yo no las veo para un chico, aunque siendo pequeños a ellos les importa poco y acaba decidiendo la madre o el padre, pero a mi me da por pensar que en un futuro verán las fotos que les hicimos de pequeños y dirán....pero porque me vestías así???

Como el nombre de Gonzalo era bastante largo, decidí ponerle su inicial en grande y con goma eva, es la primera vez que coso goma eva de 1mm. y como es lavable puede dar buen resultado en baberos, quizás es mejor opción que el fieltro, me gusta probar materiales diferentes.

Aquí esta el resultado:



lunes, 11 de noviembre de 2013

El primer encargo

A través de amistades de mi madre surgió mi primer encargo de baberos, que ilusión!!!

Eran dos baberos de niña de la talla pequeña de 6 meses a 1 año. Mi madre me avisó que no había ninguna prisa porque aun eran pequeñas y estaba disfrutando de la lactancia...pero tenia muchas ganas de probar a hacer esa talla pequeña. Cuando los corte me parecieron tan chiquitines, si es que casi no tenían tela!!! aun recuerdo cuando Vega era así, que daba miedo cogerla y parecía tan delicada... pero que gusto tener un bebe en casa, si si, da mucha faena, pero es un momento especial. Ahora es ver un bebe y lo primero que quiero es cogerlo y tenerlo en mis brazos, supongo que es mi instinto de madre ya despierto y funcionando.

No tarde demasiado en hacer los baberos, fue fácil trabajar con tan poca tela pero también se complicaba porque para coserlos tienen mas curvas pequeñas. Me costo enviarlos, es como desprenderse de un trocito de mi, les he dedicado mi tiempo, mimo y cariño, pero también pienso en sus destinatarias que van a comer con ellos y crecer mucho.

Aquí están los dos juntos, también les he hecho una foto por detrás para que se vea como va sujeto con velcros el recogemigas, para poder abrirlo, limpiarlo y colocarlo bien: 















jueves, 7 de noviembre de 2013

Un regalo sorpresa

Todos los baberos que había hecho hasta ahora eran para Vega y quería probar como quedarían mas pequeños, así que empece a reducir el patrón, proporcionando con el percentil medio y me salieron 2 tallas mas pequeñas:
  • Talla 6 meses a 1 año
  • Talla 1 año a 2 años
  • Talla 2 años a 3 años
Teniendo en cuenta que la mayoría de bebes empiezan a tomar sólidos sobre los 6 meses me pareció buena idea hacer esa talla pequeña, aun recuerdo lo difícil que fue empezar con la cuchara con Vega, siempre tuvo mas interés por comer trozos y los purés deliciosos que me los comiera yo, nunca he comido tantos purés como en esa etapa.

Para probar si había acertado con las tallas mas pequeñas hice un babero para unos amigos que tienen una preciosidad de niña de 1 año menos que Vega, así que le hice la talla 1 año a 2 años y utilice un hule bastante fino, me costo bastante coserlo y que no se rajase, incluso tuve que rehacerlo porque lo había cosido mal, es tan delicado al ser fino, espero que a ellos no les de problemas y lo usen con comodidad.

Le puse el nombre de la niña y quedo precioso, tenia mis dudas si les gustaría el estampado del hule y estuve a punto de cambiar de idea y hacerles algo con tonos rosas y quizás mas de niña, pero seguí adelante, a mi me gustaba y no lo veía nada mal. No pude hacerle mejores fotos, así que solo tengo esta:


La sorpresa esta vez no fue para mis amigos cuando recibieron el regalo, fue para mi porque el hule que tienen en la mesa de la cocina es exactamente... el mismo!!!!!  si dejan el babero sobre la mesa de la cocina queda perfectamente camuflado y se pierde. Y yo que tenia dudas sobre si les gustaría el estampado.

Al pasar los días les he preguntado como les funciona el babero y están contentos, hasta me han encargado otro. Yo voy recabando datos y opiniones, necesito saber fallos y ventajas para poder perfeccionarlos.

miércoles, 30 de octubre de 2013

Al comedor

Al principio del curso nos pidieron en la escuela de Vega un par de baberos de tela con cordones para atar y ya llevaba tiempo con la idea de hacerle unos delantales para ayudarme en la cocina, así que me puse a ello.

Tenia algunos retales de tela y les puse por detrás rizo plastificado para que no traspasen las manchas. Ademas de los cordones para el cuello, también les puse unos cordones para atar en la cintura y que no se le mueva el babero-delantal. Ah y como no...personalizados con su nombre para que no se le pierdan.


Y así me quedaron:




No se si al final del curso me los devolverán  después de todo el curso usándolos en el comedor y lavándolos casi a diario, estarán para tirar, si me los devuelven les haré unas fotos y así me sirve para ver que tengo que mejorar.




martes, 22 de octubre de 2013

Evolucionando

El primer babero que le hice nos funciono muy bien, era una tela plastificada muy suave, la compre por internet a una chica que me encanta la ropa que hace para los peques (El Rincón de Teo), resulto fácil de limpiar y a la vez ligero, pasaba el tiempo y no se deterioraba, así que estaba muy contenta con el resultado. Pero había un pequeño fallo que le encontraba y era que algunos trozos de comida que no le caían en el recogemigas iban a parar a sus piernas y ahí se quedaban pegados en los pantalones o caían en la silla y acababan en su culo.

Es cierto que los adultos cuando comemos la servilleta en la mayoría de los casos nos la ponemos en las piernas (poca gente he visto en restaurantes ponerse la servilleta en el cuello, pero los habrá seguramente), es una zona donde va a parar la comida a menudo.

Así que dándole vueltas y pensando como minimizar la zona de aterrizaje, mientras dormía a Vega y con ayuda del papi que descartaba mis ideas absurdas, poniendo un poco de cordura en el asunto, creo que se temía que precintase a la niña como una maleta de aeropuerto. De todo eso salio un babero mas grande, mas largo, en un principio pensé que esa zona de las piernas se pudiera quitar y poner, pero al final lo deje cosido. El resultado fue este:




Y ahora miro la fecha de la foto, porque se la hice al poco de coserlo y ya tiene 3 meses, si hiciera una foto a fecha de hoy se puede ver que sigue impecable, solo se nota mas usado en las tiras de los remates, lo he lavado dos veces a mano y una vez me lance a meterlo en la lavadora para probar...si si, al principio pensé que me había quedado sin el cuando lo saque y eso que utilice un programa suave con agua a 30º, pero estaba muy blanquecino, parecía incluso con la tela plastificada deteriorada, aunque al rato de tenerlo en el tendedero fue secándose y volvió a estar igual.....ufff menos mal!!! ya decía yo, si ponía que la tela se podía lavar a maquina. La tela que utilice es una tela plastificada de Ikea, también la hay en negro pero me gusto mas este color.

Este es el babero que tenemos para uso diario en casa y le damos una buena batalla, funciona muy bien para sólidos o purés, aunque alguna vez le ha caído al recogemigas una buena cantidad de zumo y Vega no se ha manchado porque aunque este cosido y tenga agujeritos, por detrás le pongo una tela de refuerzo plastificada.

sábado, 12 de octubre de 2013

El primero de todos

Al cumplir mi hija Vega dos años ya habíamos acumulado por casa una buena cantidad de baberos, algunos muy acertados y otros sin apenas utilizar, cada uno había tenido su momento y su lugar, pero seguíamos usando babero cuando comía. 

Quizás empezó muy pronto en el manejo de la cuchara y se enfadaba si le quería dar yo de comer, así que me dedique a observar y básicamente a arreglar el estropicio, porque las cucharadas volaban y aterrizaban en cualquier lado, poco a poco ha perfeccionado el manejo.


Los baberos que mejor nos funcionan son con recogemigas y así algo le quitamos al suelo o a sus piernas y mis preferidos son los de material plástico, aunque los de tela van muy bien para líquidos y siempre tenemos uno a mano, pero lo utilizamos menos.

Tras comprar varios baberos de plástico y ver como desaparecían los dibujos con el uso, el plástico se deterioraba, incluso en algunos el dibujo se quedaba pegajoso (todo por usar la bayeta mojada para limpiarlos), me canse de comprar baberos, así que me decidí a hacer uno yo, a medida, porque ya se le iban quedando pequeños. Para que no desapareciesen los dibujos y nos quedásemos con un par de dinosaurios sin cabeza o un Mickey sin orejas pensé hacerlo de hule, resistente y practico.


Y aquí esta el resultado: